Con el avance del calor, poder disfrutar la bebida a la temperatura ideal puede ser un gran desafío, pero existe una manera, comprobada científicamente, para lograrlo.
El avance del calor y las altas temperaturas pueden convertirse en un obstáculo para tomar vino en esta época del año. Pero, tranquilos, no es algo imposible de sortear. Si el plan surgió de manera inesperada o compramos la botella a última hora o nos olvidamos de sacarlo del armario, existe un método que ha sido comprobado científicamente y sirve para enfriar la bebida en solo 20 minutos.
Primero lo primero. Es importante recordar que no todos los tipos y estilos de vinos tienen la misma temperatura ideal de servicio. Un truco muy usado por los sommeliers y expertos de la industria es sacar el vino blanco de la heladera 20 minutos antes de tomarlo y meter un vino tinto en la heladera 20 minutos antes de descorcharlos.
Sin embargo, no es lo mismo un vino joven que uno que ha tenido crianza. Por caso, un vino espumoso se sirve idealmente a 7°C; un blanco dulce a 8°C; un tinto joven a 9°C; un blanco joven seco y el vino rosado a 10°C; un generoso a 11°; un blanco con paso por barrica a 12°C; un tinto con crianza a 15°C; mientras que un tinto reserva y gran reserva a 17°C.
Si se sirve unos grados por encima o por debajo de esa temperatura no vamos a tener ningún problema. Aun así, si llegamos a los 4°C sí vamos a ver consecuencias negativas, ya que se acentúan los sabores ácidos, los taninos son más astringentes y el frío bloqueará los aromas. En el caso contrario, si estamos por arriba de los 20°C, la presencia del alcohol será más presente.
Qué no hacer para enfriar un vino
Un estudio realizado en 2012 por el científico, divulgador y profesor de la Universidad de Boston, Greg Blonder, experimentó con todas las maneras conocidas para enfriar un vino sin arruinar sus características organolépticas. Así, llegó a la conclusión de la técnica más efectiva, pero también aquellas que no deben aplicarse.
La primera de ella es que la botella no debe meterse en un freezer o congelador directamente. Tampoco es efectivo envolverlo en una toalla o servilletas de papel húmedas. Mucho menos servirá echar cubos de hielo directamente en el vino o servirlo y llevar las copas a la heladera.
Cómo enfriar un vino en 20 minutos
Basados en la experiencia científica de Blonder, son solo tres las técnicas efectivas para enfriar un vino -o cualquier otra bebida- en un lapso de 20 minutos o menos. La primera y más conocida es meterlo 20 minutos antes de servirlo a una heladera si es tinto o sacarlo 20 minutos antes si es blanco.
Pero, si nos olvidamos de ponerlo o no tenemos esos 20 minutos, la única técnica efectiva con lo que tenemos a manos es meter la botella en un recipiente metálico -o una olla de cocina-, llenarlo de agua fría y agregar hielo y tres o cuatro cucharadas de sal. Justamente este último elemento es la clave para enfriar las botellas en unos 15 minutos, es que bajan la temperatura de congelación del agua, logrando que tanto en estado sólido como líquido se encuentre por debajo de cero grados, incluso puede llegar a -1.5 grados.
La tercera y más rápida de todas, ya sea para enfriar o calentar las bebidas, serían los dispositivos de termoquímica, como saco de gel o bolsas especialmente diseñadas para meter una botella. Así se conseguiría un enfriamiento químico exprés. Sin embargo, no todos los consumidores cuentan con este elemento.