Según un estudio realizado por el Instituto Nacional de Salud de EE. UU. (NIH), el consumo de dos copas de vino tino al día colabora con algunos aspectos de la salud.
Un estudio del Instituto Nacional de Salud de EE. UU. (NIH) revela que consumir hasta dos copas de vino tinto al día puede ser beneficioso para la salud, reduciendo el riesgo de enfermedades cardíacas, hipertensión, cáncer e incluso diabetes.
En este estudio, que incluyó tanto investigaciones in vitro como in vivo, participaron 101 pacientes de aproximadamente 60 años que consumían alcohol regularmente y otro grupo de 104 voluntarios abstemios. Los resultados mostraron que quienes consumían vino tinto mantenían niveles de azúcar en sangre más bajos que los abstemios.
Este descubrimiento refuerza la idea de que el vino tinto puede ser una bebida saludable cuando se consume con moderación. De hecho, varios estudios han arrojado resultados similares. Una de estas investigaciones encontró que los bebedores habituales de vino tinto tienen niveles más bajos de glucosa, y por ende, una menor probabilidad de desarrollar diabetes en comparación con los abstemios.
Otro estudio realizado con ratas demostró que el resveratrol, un polifenol presente en el vino tinto y otros frutos, ayuda a reducir los niveles de glucosa en sangre, especialmente en dosis altas.
El vino tinto, contiene altas cantidades de polifenoles como el resveratrol, antocianinas, catequinas y taninos, especialmente en los vinos oscuros y rosados. Estos componentes contribuyen a los beneficios siempre y cuando se trate de un consumo moderado.
Otra investigación indica que el vino tinto disminuye la resistencia a la insulina, un factor clave en la prevención de la diabetes tipo 2. Además, se asocia con una menor incidencia de eventos cardiovasculares y una reducción en la mortalidad por enfermedades crónicas.
Aunque estos hallazgos sugieren que el vino tinto puede ser beneficioso, es importante consumirlo con moderación. Antes de incorporarlo regularmente en la dieta, es recomendable consultar con un médico para despejar cualquier duda.
Es esencial destacar que el consumo de vino tinto debe ser moderado y formar parte de una dieta equilibrada para que sus efectos sean positivos. Una dieta adecuada que se complementa con el consumo de vino tinto es la dieta mediterránea, donde esta bebida ha sido parte de la vida cotidiana durante siglos.
Para las personas con diabetes, es crucial controlar la enfermedad y comprender cómo el alcohol puede afectar su condición. El consumo de alcohol de
be ser moderado: las mujeres no deberían tomar más de una copa al día y los hombres no más de dos copas al día.