Como todo en su justa medida tiene beneficios para distintas partes del organismo. Pero cuáles son los principales y a que se debe esta lista formado por estudios académicos.
Lo decía el doctor René Favaloro hace unos años, una copa de vino tiene beneficios en lo cardiovascular. ¿Pero esto es cierto? En esta nota derribamos algunos dichos que la ciencia ha comprobado y ponemos el foco en las cualidades para la salud del consumo moderado de la bebida nacional argentina.
Numerosos estudios han probado cuales son las oportunidades para la salud de consumir regularmente cierto tipo de alimentos, capaces de hacernos adelgazar, ayudar al corazón a mantenerse sano o reducir el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer. Sin embargo, muy pocos alimentos acumulan tantas cualidades positivas como el vino.
Los 7 beneficios para la salud que da el vino
1. Combate la grasa
El consumo de vino tinto activa la función de un gen que impide la formación de nuevas células de grasa y ayuda a movilizar las existentes, según un estudio realizado en el Instituto Tecnológico de Massachusetts. Aunque contiene siete calorías por gramo, en dosis moderadas, contribuye a reducir la obesidad y el sobrepeso al envejecer.
2. El vino mata las bacterias bucales
Al parecer, algunos compuestos presentes en esta bebida frenan el crecimiento bucal de los estreptococos y bacterias vinculadas a las caries, además del de otros asociados a la gingivitis y dolores de garganta. Se recomienda tener una buena higiene bucal para no desafíar a los abrasivos y bacterias que pueden generarse con las comidas.
3. Mejora de la función cognitiva
Más de 50 estudios demuestran que el consumo moderado de vino mejora el funcionamiento del cerebro y, en pequeñas cantidades, previene la demencia. Los científicos creen que se debe a que la elevada presencia de antioxidantes en su composición contribuye en varios aspectos.
4. Componente del placer
Al degustar con moderación se liberan endorfinas en dos áreas del cerebro, aumentando la sensación de placer, de acuerdo con un estudio realizado en la Universidad de California.
5. Contra el sedentarismo
Una investigación publicada en The FASEB Journal, sugiere que el resveratrol de la uva disminuye las consecuencias negativas de la vida sedentaria.
6. Contribuye al paladar durante las comidas
El vino ayuda a percibir mejor los sabores que cuando se acompaña con otra bebida. Esto se debe a sus propiedades astringentes, que evitan la excesiva sensación de grasa causada por alimentos como las carnes rojas y permiten degustar mejor la comida.
7. Reduce el riesgo del cáncer
Cuando no hay consumo problemático el vino puede reducir la posibilidad de desarrollar un cáncer. Estas propiedades podrían deberse a que uno de sus componentes, el resveratrol, frena los efectos del estrógeno, la hormona femenina por excelencia y evita uno de los cánceres que más padece las mujeres, el de mama.