El fin de semana el Valle de Uco dio uno de los mejores atardeceres del otoño y fue en compañía del gran evento que organizó la bodega y el chef invitado Pedro Demuru.
El ambiente daba esas vibras de valle encantado, las flores elegidas sobre la mesa, los viñedos, la montaña y la decoración nos posicionaron en un escenario de lujo y natural. Valle de Uco Encantada fue una propuesta de la bodega Gimenez Riili y el chef de Cariló, Pedro Demuru que te transportaba a otro mundo.
La bodega es un proyecto familiar que se encuentra en la localidad de Los Sauces, Tunuyán, Valle de Uco, conocidos no solo por su vino y restaurant, sino también por el hotel que se encuentra a pocos metros de distancia. La bodega está equipada con tecnología de última generación. El secreto para esta familia vitícola es la sabia combinación de la tecnología con la intuición para descubrir los momentos de cada proceso. El resultado, los vinos que producen e invitan a compartir.
Con una gran mesa llena de flores naturales esperaron a los comensales para dar inicio a este gran almuerzo. A medida de que las personas fueron llegando pudieron disfrutar de la recepción con Buenos Hermanos Brut Nature, acompañado de un tapeo pensado para la ocasión.
La propuesta que se trajo a Mendoza fue ideada junto a Federico Gimenez Riili, dueño de la bodega y gran anfitrión. Con el objetivo de poder hacer una experiencia en Valle de Uco, que no perdiera el nivel de los platos, que fuera mucho más relajado y disfrutable, con el maridaje de los vinos de la bodega.
El menú tuvo representados en viñedos cada uno de los pasos
Viñedo 1: Buenos Hermanos Torrontés. Duraznos en su piel a la chapa + mousse de queso de cabra, almendras tostadas y jugo de Chardonnay aromatizado en cardamomo.
Viñedo 2: Buenos Hermanos Merlot: Textura de tomates + cilindro de humita en masa phylo con polvo de olivas negras al sol y arena de maíz.
Viñedo 3: Tío Excéntrico Blend de Tintas. Trucha confit en oliva en compresión de pimentón + tartar de trucha a la lima en jugo de palta y jalapeño + crocante de mandioca y brotes de la cordillera.
Viñedo 4: Gran Familia Syrah. Rillette de chivo al disco + lomo en cocción animal con ragout de morillas, mousseline de cabutia al carbón y demiglace doble de Malbec.
Viñedo 5: Buenos Hermanos Dulce Natural. Turrón de pistacho + ganache de chocolate al 70% + frutos rojos y crema inglesa de vainilla al tomillo.
Mientras se disfrutaba de la gastronomía de lujo había música en vivo del violinista Fran Ccesco y al ritmo de las cuertas un pintor que retrataba el Valle de Uco en lienzos blancos que terminaron llenos de color. Además, después del almuerzo y junto con el atardecer, los presentes pudieron subir al globo aerostático para admirar las impactantes vistas que ofrece el hotel.
Quién es el Pedro Demuru, chef a cargo de la experiencia
Pedro Demuru tiene más de diecisiete años de experiencia en gastronomía y se destaca por la originalidad de sus recetas, la estética de sus platos y la combinación de sabores. El chef comenzó sus pasos en la gastronomía en los 90, trabajó en su juventud con Dolly Irigoyen y construyó así una carrera exitosa. Hace muchos años viene haciendo cocina de autor, que es a lo que en la diaria se dedica pero en la localidad de Cariló en el restaurante Carpe Diem, en Cariló Golf y en su propio restaurante, Demuru.
Anteriormente tuvo restaurantes en Pilar y Palermo, pero un día la cotidianidad lo agotó y decidió emprender viaje a la costa. Actualmente, es considerado el mejor chef de la localidad donde vive y cuenta con tres restaurantes. Desde Buenos Aires no solo trajo ganas de hacer que todos pasaran un gran momento, sino que su hijo lo campañó y cocinó junto a él.
Aunque Pedro trabaja en la costa y el pescado es lo primero que se nos viene a la mente, su carta tiene un poco de todo, hay platos con ciervo, cordero, sandwiches extra grandes, platos veggies, entre otros platos que el autor va creando en distintas ocasiones. Esta vez cocinó en la montaña y para él fue maravilloso. Con respecto al cambio de locación afirmó: “Son distintos, más que nada porque se me cambian los equipos de trabajo, allá tengo todo muy resuelto y cuando venís acá tenes que ponerte a trabajar uno fuerte. Son experiencias siempre muy lindas, para mi cocinar es lo que me gusta hacer, lo hago con pasión”.
El menú se hizo basado en los vinos de la bodega, con la asesoría de Federico y resaltó que la experiencia lo es todo en este tipo de eventos. “A mi cocinar acá me encanta, puedo estar una semana. A lo que voy es que no es un estrés, el menú fue muy pensado con los productos autóctonos como el tomate, el chivo, la trucha y buscando lo de acá”, cierra el chef.
