El joven enólogo, que este año fue elegido como el mejor por Tim Atkin, habló con Guarda14 por el Día del Vino, bebida nacional.
Con motivo de una nueva celebración del Día del Vino, bebida nacional, Guarda14 habló con Andrés Vignoni, uno de los jóvenes enólogos más destacados en la actualidad, sobre los desafíos de la industria del vino, el posicionamiento de Argentina en el mercado mundial, la influencia del coronavirus en esta añada y la próxima, y mucho más.
El elegido como el “Joven enólogo del año” por Tim Atkin nombró cuatro factores que han influido en el posicionamiento mundial de nuestro país: “La herencia que nos convierte en el viejo mundo dentro del nuevo mundo del vino”, por un lado; el terruño, como segundo factor; el Malbec, “que abrió las puertas para que muchos elijan al vino argentino”; y “nuestra idiosincrasia a la hora de trabajar, poco se habla pero eso pasa poco en otros lugares del mundo”.
Para Andrés “es muy difícil encontrar un caso en el mundo como el del Malbec argentino, con el éxito y la versatilidad que presenta en todo el país”. Así mismo, resaltó que en Argentina “tenemos posibilidad de desarrollar vinos de gran manera gracias a la versatilidad del territorio”.
Para que el vino argentino continúe creciendo, Vignoni estimó que en el mercado externo, “una de las deudas del vino argentino es salir del escudo del Malbec”. Mientras que puertas para adentro, “tenemos que encantar a los consumidores con otras alternativas, no solo de varietales”. Para eso, es necesario “acercar al consumidor que no se anima por miedo a no entender lo que hay dentro de la copa, hay que entender menos y disfrutar más”.
“Nuestra generación es la encargada de no respetar los preconceptos y hacer lo que tengamos ganas. Siempre hay consejos, pero está en nosotros hacer lo que nos satisfaga”, enfatizó.
Sobre las nuevas tendencias de consumo, Andrés Vignoni aseguró: “Estoy a favor de un consumo más cercano y cuidadoso de la salud, siempre y cuando mantenga las características del vino”. El enólogo se mostró favorable a la elaboración de vinos con menos graduación alcohólica, pero también se calificó como un “purista”: “Prefiero que lo que nos da la tierra se termine traduciéndose directamente en el vino”. Así mismo, opinó que “los vinos con cero alcohol dejarían de llamarse vino”, y agregó que él no haría un vino desalcoholizado.
Por otra parte, planteó que “el vino en lata es una opción válida, con muchas ventajas”.
Sobre el futuro de la vitivinicultura de nuestro país y del mundo, Vignoni sostuvo que “hay grandes pasos hacia la vitivinicultura sustentable”. “Hay una generación que está con esas ideas en la cabeza, de suprimir eso que le hace daño a la tierra”, manifestó y comentó que, según las tendencias mundiales de consumo, “en muy poco tiempo lo que no sea así, no será bien recibido”.
El enólogo de Viña Cobos destacó que en este 2020 “la gente se amigó nuevamente con el vino” y que esta tendencia de consumo se va a mantener “si tenemos los pies sobre la tierra a la hora de contarle a gente de qué se trata”.
“La pandemia ha dejado su sello en esta añada”, sostuvo Vinoni y consideró que obligó a la industria a repensar los planes de contingencias. “En vista a la cosecha 2021 no tenemos asegurado que los trabajadores golondrinas puedan venir y eso preocupa, sobre todo a los que apostamos a la cosecha manual”, dijo sobre lo que se va a enfrentar el sector en los próximos meses.
Para cerrar, Andrés mencionó que el mejor vino que ha hecho es el Cobos Malbec 2019, que saldrá a la venta recién en 2022. “Ese año nos dio a los enólogos todo para que sea el mejor”, comentó y recomendó a los amantes del vino comprar algunas botellas de sus varietales o etiquetas preferidas para poder disfrutar de la “mejor añada de los últimos diez años”.