Con el Bitcoin a la cabeza, cada vez son más las tradicionales casas de subastas de vino que aceptan las monedas digitales como medio de pago.
El número de prestigiosas y antiguas casas de subastas que aceptan criptomonedas como forma de pago para vinos finos en todo el mundo no para de crecer. Uno de los ejemplos es el de BTC Wine, un minorista de vinos con sede en Burdeos, Francia, se convirtió en uno de los primeros en aceptar criptomonedas, o “cripto”, como pago por prestigiosos vinos franceses.
“Pensé que era una buena idea usar criptomonedas como pago porque es rápido, seguro y conveniente”, dijo Louis de Bonnecaze a Wine Spectator. “La gente quiere gastar la moneda virtual y convertirla en un activo tangible, y comprar vinos finos puede ser una solución”, consideró el hombre que en 2015 comenzó a sumergirse en el mundo de las monedas digitales.
De Bonnecaze usa Crypto.com para cambiar sus tokens por euros. Una de las ventajas del dinero digital que resalta es la instantaneidad: “Cuando utilizamos transferencias bancarias para negocios internacionales, se necesitan tres o cuatro días para pagar, pero un pago de Bitcoin es casi instantáneo”, contó. “Puede recibirlo 10 minutos después”.
Además, desde que las utilizan han aumentado las ventas. Él dice que la mayoría de los compradores de BTC Wine son hombres de entre 25 y 45 años, y que las personas que han ganado mucho con las inversiones de Bitcoin están impulsando sus ventas de los primeros crecimientos de Burdeos.
Pero este no es el único ejemplo de casas de subastas de vino y minoristas que han aceptado los tokens digitales, con el Bitcoin a la cabeza, aunque todavía hay algunas dudas al respecto.
Otro caso es el de Acker, un comerciante de vinos de 200 años que registró ventas récord en subastas en 2020, que anunció recientemente que aceptará monedas digitales para subastas y compras minoristas a través de BitPay, un proveedor de servicios de pago que ayuda a convertir moneda digital en efectivo para comerciantes. Las aptas para estas operaciones son Bitcoin, Bitcoin Cash, Ethereum, Dogecoin, PAX (Paxos Standard Token), Gemini Dollar y BUSD (Binance USD).
Según John Kapon, presidente de Acker, este parecía el momento adecuado para ofrecer opciones de pago adicionales que se han vuelto populares entre la red de amantes del vino de la casa. “Está claro que ha habido una riqueza significativa creada por la criptomoneda, y creemos firmemente que las personas que ya invierten y realizan transacciones en criptomonedas también serán receptivas a una clase de activos alternativa como el vino, que también ha tenido un desempeño excepcional a lo largo del tiempo”, explicó.
En Chicago, Estados Unidos, la casa de subastas Hart Davis Hart ha estado aceptando criptomonedas desde 2019. Ese mismo año, la casa de subastas y minorista con sede en Toronto Iron Gate Wine se convirtió en una de las primeras en aceptar criptomonedas para sus productos. La empresa, fundada por Warren Porter, tiene tiendas minoristas en Nueva York, instalaciones de almacenamiento en Toronto y realiza subastas en todo Canadá.
“Para mí, es importante ser el primero cuando la tecnología tiene sentido, y lo hizo”, declaró Porter sobre la aceptación inicial de las criptomonedas. “Para mí, no es diferente a un euro o cualquier otra cosa. Cualquier cosa que pueda convertir inmediatamente en dólares estadounidenses, lo tomaré”, completó.