Para los amantes del vino, tener un lugar de la casa reservado para guardar esas botellas que se reservan para alguna ocasión especial en óptimas condiciones suele ser algo fundamental. Si todavía no tenemos nuestra cava o bodega casera, una de las principales preguntas que pueden surgir es en qué lugar conviene instalarla.
Aunque para muchos pase desapercibido, el vino es un producto que puede alterar sus características notablemente en función de condiciones como la temperatura, la exposición a la luz, humedad, etc. Pero no es algo para desanimarse, en cualquiera de nuestras casas podemos encontrar un entorno ideal para disfrutar un vino con sus cualidades intactas.