El rey de la masa madre pasó por Mendoza y entre viñedos y vinos contó todos los secretos de la preparación

El rey de la masa madre pasó por Mendoza y entre viñedos y vinos contó todos los secretos de la preparación
Con sus fotos y videos en Gluten Morguen, Ramón Garriga se convirtió en el rey de la masa madre. - Instagram

Ramón Garriga, el hombre detrás de Gluten Morgen, brindó una clase magistral en Terrazas de Los Andes. Sus inesperados comienzos, su relación con el vino y más.

Casi de manera inesperada, Ramón Garriga se convirtió en el rey de la masa madre en Argentina. Mucho antes de que se escuchara este concepto o se pusiera de moda -principalmente durante el aislamiento- comenzó a investigar sobre el tema de manera autodidacta al punto de convertirse en referente para figuras reconocidas de la gastronomía argentina. Así nació su proyecto Gluten Morgen, un suceso en las redes sociales que lo trajo ahora a la provincia de Mendoza para brindar una clase magistral sobre la preparación entre viñedos y, como no podía ser de otra manera, acompañado de vino en Terraza de Los Andes.

“Viví un tiempo en España y no es que diga que el pan de ahí es mejor, pero en algún momento estaban más adelantados que nosotros. Cuando volví al país me pasaba que no encontraba un rico pan que me gustara. En esa búsqueda encontré a unos franceses que tenían el pan que me gustaba y hablaban de masa madre”, dijo en diálogo con medios mendocinos entre los que estaba Los Andes.

Promovido por la curiosidad comenzó a buscar en internet, a ver videos y experimentar con recetas de masa madre, pero de repente se encontró con la popularidad. “En ese momento me gustaba sacar fotos de lo que cocinaba y empecé a compartirlas en redes. Después me uní a un grupo en Facebook que se llama Buena Morfa y ahí empecé a compartir lo que hacía y los panes. No digo que soy el primero en hacer masa madre, pero sí quizás quien empezó a hacerlo más conocido y fotografiar el pan. Una cosa fue llevando a la otra y conocí a Mariana Koppmann y Fabio Alberti. Él fue quien me propuso hacer una clase en una feria de cocina. Así arranqué con las clases, un poco por el empuje de la gente”, recordó.

A pesar de no ser panadero o no salir de las entrañas del mundo culinario, Ramón fue muy bien recibido por los que ahora son sus colegas. “Lo más loco es que hace unos años le terminé dando clases a Christophe (Krywonis) y a Dolli Irigoyen porque querían saber lo que hacía. Empezaron a sumarse cocineros conocidos que los veía en la tele y yo venía de otro lado”, destacó.

La relación con el vino y la fama

Para Ramón Garriga, pan y vino van de la mano. “Son fermentos y están unidos por las levaduras. Si bien en Argentina siempre hubo vino, no tenía el nivel que tiene ahora. Le pasó también a los fiambres, a los quesos y ahora es el turno del pan. La cocina vuelve un poco a tener sabor. Ese es el cuarto ingrediente del tiempo, ahora empezamos a respetar de nuevo que hay que darle tiempo a las cosas para que tengan su sabor”, opinó durante su primera clase presencial luego del periodo de aislamiento que se vivió este 2021.

Y justamente la cuarentena fue un potenciador de su proyecto. Es que las recetas y tutoriales que él comparte en sus redes multiplicaron sus visitas durante los meses en los que los argentinos no podíamos salir de casa. “Yo siempre traté de contestar a todo el mundo y me gusta tratar de ayudar a la gente. Me emocionó que, durante la pandemia, mucha gente perdió el trabajo y me contaba que la masa madre los salvó y les ayudó a empezar emprendimientos”, manifestó.

“Yo tengo mis redes, donde me gusta compartir las cosas. Como vengo de la música y la publicidad, sin querer, apunté todos los conocimientos que venía generando para otros en mí y ahora que hemos visto lo que se genera lo sigo haciendo. Pero no es que lo pensé, se dio de manera instintiva. Yo siempre estuve detrás de los artistas, pero un día se dio vuelta la cámara y quedé de este lado. Me divierte y hago lo que me gusta”, explicó sobre su popularidad.

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