Con alternativas para todos los gustos, repasamos blancos, rosados, espumantes y tintos que comparten características que los convierten en los mejores para esta estación.
Verano, calor, fiestas, piletas, playas, río, son algunos de los conceptos que se nos vienen a la mente de manera casi automática en esta época del año. Un elemento fundamental y complemento de todas esas situaciones que nos falta mencionar es la bebida y en Mendoza la respuesta por excelencia es el vino. Pero, ¿cuáles son los mejores vinos para refrescarse ante las altas temperaturas?
Esta interrogante depende del gusto del consumidor. Sin embargo, ya sean blancos, rosados, espumantes o tintos, los vinos que mejor acompañan esta estación son sin dudas aquellos frescos, livianos y fáciles de beber.
En este sentido de “democratización” y opciones para todos los gustos, Adrián Cura, gerente de Marketing de Bodegas Bianchi, contó que están trabajando tres territorios que conjugan a los consumidores y la industria del vino: el saber, el bienestar y las energías, donde hay diferentes demandas.
En el primero de ellos se relaciona con los conocimientos más técnicos del mundo del vino. En el territorio del bienestar el consumidor no se apega al saber y hasta puede tener rechazo, lo que busca es el disfrute. Por último, el territorio de las energías, donde lo que buscan es que los consumidores ingresen a una edad temprana al vino.
Desde Bianchi se presentan opciones para cada uno de los tres, pero los últimos dos territorios están más relacionados con los vinos que se disfrutan en esta estación y con consumidores sin ningún tipo de prejuicio respecto a cómo se debe tomar el vino, dispuestos a experimentar. “Al consumidor no lo podemos interpelar o abrumar con conceptos que buscan otros segmentos. Aprovechamos la versatilidad que tienen estos vinos y permitimos que se tomen de diversas maneras”, sostuvo Cura.
El gerente de Marketing de Biancchi destacó el New Age, un vino a base de Torrontés, finamente gasificado, que desde comienzo de año también se ofrece en lata. Esta marca ha tenido una gran difusión en Estados Unidos, donde se ha creado un mix compuesto por hielo, vino y lima limón. “Es muy consumido y se difundió tanto que lo hemos bautizado con el nombre de ‘Tincho’, en honor a Tincho Bianchi, uno de los principales enólogos que tuvo la bodega”, comentó Cura.
“También podemos sumar las líneas Valentín Lacrado o Fincas Los Primos, que se pueden disfrutar bien frescos, no presentan inconvenientes al agregado de hielo, frutas o jugos”, resaltó.
Los vinos clásicos del verano
Una tendencia estival es el mayor consumo de vinos blancos, rosados o espumantes. “Por las temperaturas que manejamos en verano, que son muy altas, la gente busca cosas frescas, frutadas, con poco alcohol, buena acidez. La idea es que sean cosas que sean fáciles de tomar”, dijo Leandro Funes, enólogo de A16.
A partir de este concepto, desde la bodega lujanina ofrecen algunas opciones de blancos, rosados y espumantes en sus líneas Civit 757 y Punto Ar -disponibles en Tienda Los Andes-, que cuentan con varietales blancos como Chardonnay y Sauvignon Blanc, algunos Malbec Rosé elaborados por sangría, prensado y dulce -muy usado en coctelería- y dos espumantes: el Brut Nature (Chardonnay y Chenin) y un Torrontés Dulce.
Con la frescura como lei motiv, Juan Pablo Díaz, enólogo de Bodegas López, enumeró algunas de las opciones que la bodega de Maipú elabora. Empezando por el López Sauvignon Blanc, encontramos un vino joven, que tiene notas cítricas y algunas notas herbáceas, liviano que lo hace fresco y fácil de tomar.
El enólogo de Bodegas López también destacó el Rincón Famoso Rosé. “Es un producto que presentamos en 2020, un corte de Pinot Noir y Malbec, muy aromático y equilibrado en boca. Es un vino muy versátil que se adapta a cualquier situación del día o de la noche”, detalló Díaz.
En los espumantes, el Montchenot Extra Brut, encaja en el estilo más consumido en el país. “No empalaga, entrega frescura y tiene mucha redondez. Es un corte de Chardonnay, Semillón y Pinot Noir del año, lo que marca que es muy aromático”, agregó.
Recientemente salido al mercado, Bodega Santa Julia ofrece para esta estación su vino Nacional. Nancy Jhonson, sommelier y embajadora de marca de Santa Julia, lo calificó como una propuesta para los que eligen los vinos más ligeros, frescos, frutados y fáciles de beber. Es un homenaje a dos variedades emblemáticas de nuestro país, con un 70% de Semillón, una uva con una larga historia en Mendoza, y un 30% de Torrontés, la única cepa autóctona argentina.
Otro que podemos sumar a la lista es el Estate Malbec Rosé 2020 de Bodega Kaiken. “Lo importante para elaborar este ejemplar es la cosecha temprana, la que le produce una acidez natural y una muy buena frescura”, expresó Rogelio Rabino, enólogo de la bodega.
Los tintos también juegan en verano
Aunque principalmente la estación se asocia con vinos como los que mencionamos anteriormente, los vinos tintos también tienen su lugar en esta época del año.
López Malbec y Château Vieux Malbec son dos vinos tintos que marcan frescura con diferentes cuerpos. Según explicó Juan Pablo Díaz, el primero es más liviano y tiene mucha fruta, mientras que el segundo tiene más cuerpo, pero su acidez marca más frescura. Ambos son vinos muy aromáticos y tienen un leve paso por madera que aumentan los aromas. La madera está en ambos en un segundo plano.
Dentro del portfolio de Santa Julia, el Tintillo, se presenta como un tinto joven y fresco, que acompaña las temperaturas que hay en Argentina. “Lo recomendamos para beber refrescado, que podemos beber a la temperatura de los blancos. Es un Blend de Malbec y Bonarda elaborado con maceración carbónica, lo que disminuye la presencia de taninos”, argumentó Nancy Jhonson.
Clara Roby, enóloga de Familia Millán y Mosquita Muerta, consideró que el vino ideal para el verano es el Mosquita Muerta Perro Callejero Pinot Noir 2019. “Es sumamente fresco, con una fruta roja como la frutilla y la frambuesa en su estado más fresco, con un tanino suave y amable. Este Pinot Noir posee una versatilidad enorme que ayuda en los días de verano donde las preparaciones pueden ser frescas durante el día y un poco más elaboradas por la noche”, planteó la experta.
Otra opción en tintos es el Mythic Divine Creations Malbec Nouveau 2020, un vino elaborado bajo la técnica de maceración carbónica, con racimo entero, lo que da un vino frutal, fresco y joven. “El trabajo es de manera artesanal, manual, buscando cada detalle para obtener un producto único en el mercado. Personalmente, siento que es un vino ideal para maridar con comidas frescas y por supuesto para beberlo solo”, opinó Verónica Ortego, enóloga de Dartley Family Wines Mythic Cellar.
Vino en lata: cada vez más opciones
Por las características del envase, la lata se posiciona como una de las opciones más conveniente para esta época del año y cada vez son más las bodegas que apuestan por diversificar la oferta de vinos que encontramos fraccionados de este modo.
Uno de los pioneros en nuestro país en apostar por el vino en lata fue Santa Julia. Recientemente, la bodega de Familia Zuccardi ha ampliado su oferta con la incorporación de Santa Julia Orgánica Malbec Rosé en lata, entre otros. “Es un envase que tiene un montón de ventajas y es el más sustentable de toda la cadena de bebidas. Se enfría rápidamente, es el tamaño perfecto para dos copas y para que cada uno pueda tomar el vino que le guste”, elogió la embajadora de marca de la bodega.
Juan Pablo Díaz, también ponderó las bondades que presenta este envase, más allá del tamaño y las posibilidades de refrigeración, es fácil de transportar, consumir y se adapta a diversas situaciones. En el caso de Bodegas López, cuentan con Traful Dulce, un vino que está hecho con Moscatel, Torrontés y Semillón por lo que es muy aromático. Y si bien es dulce, tiene muy buena acidez que le da un equilibrio en boca que no lo hace empalagoso.
Quienes prometen sumarse al mercado de las latas en el mes de enero es A16. Leandro Funes anticipó que en la bodega ya tienen el vino listo y el proyecto encaminado para poder comenzar con el fraccionamiento en el primer mes del 2021. “Se trata de tres propuestas de vinos que no son ni espumantes ni dulces: Sauvignon Blanc, Malbec Rosé y un Malbec. Si bien el mayor consumo del producto se da en esta época, nuestro proyecto apunta más a una practicidad a la hora de tomarlo. La idea es que en la lata de 310 cc puedan encontrar un vino tranquilo de buena calidad para darse un gusto en cualquier momento”, cerró el joven enólogo.