Negroni: el cóctel centenario con vigencia indiscutida

Un cocktail ideal para equilibrar el organismo. El Martini es bueno para tu hígado y la ginebra es mala; con esta bebida lo bueno y lo malo se equilibran".

La frase pertenece al recordado Orson Welles, un fanático del Negroni; y bien vale como introducción para describir a esta bebida que, en 2019, celebra sus primeros cien años, desde su creación, allá, en Florencia (Italia).

Como parte de las celebraciones por este aniversario, en distintos países, incluida Argentina, se realizará, del 24 al 30 de junio, la #NegroniWeek (Semana del Negroni) y su objetivo tiene que ver con una iniciativa solidaria organizada por Campari: recaudar fondos para instituciones no gubernamentales.

Este año, Argentina destinará nuevamente todo lo recaudado al Banco de Alimentos, una de las organizaciones más reconocidas de Argentina que contribuye a reducir el hambre, mejorar la nutrición y evitar el desperdicio de alimentos.

Con todo, ya hay, por lo menos, dos buenos motivos para participar de este acontecimiento internacional. Además de la colaboración con el fin benéfico, existe la posibilidad de disfrutar de un trago con una marcada tradición y elegancia suprema, con su receta clásica o alguna de las infinidades de versiones existentes como sólo los bartenders las pueden ofrecen.

Un poco de historia

El Negroni es un cóctel italiano creado en 1919. Fue en el café Casoni de Florencia, lugar de reunión de la aristocracia del momento.

Camillo Negroni, habitual de este espacio, cansado de su típico Americano (un trago que se preparaba con campari, vermut dulce y soda) le pidió a su barman de confianza, Fosco Scarselli, que le cambiara la parte de soda por una parte de ginebra.

De esta manera, se consiguió fortalecer el cóctel. Fosco Scarselli cambió la rodaja de limón decorativa típica de aquel cóctel y le puso una rodaja de naranja, tan distintiva hoy en el Negroni.

Según los entendidos, dicen que el Negroni es un cóctel que está en el ADN de todos los italianos y de todos aquellos que emigraron a países como Argentina, donde hay una gran tradición por este cóctel.

A pesar de ser un cóctel de aperitivo, es un trago que se puede degustar de múltiples maneras: tanto antes de una comida o una cena, como hasta altas horas de la noche.

Trilogía imbatible

Si algo le faltaba a este trago para convertirse en irresistible, es que su preparación es muy simple y accesible a cualquier persona que se anime a prepararlo. Un clásico Negroni lleva tres ingredientes principales y el resto viene por la mano de quien realice la mezcla.

El paso a paso:

-utilizar un vaso corto estilo Old Fashioned;

- colocarle dos o tres bloques de hielo grandes y transparentes. No se recomienda usar hielo picado porque el trago quedaría demasiado aguado.

- agregar 30 ml. de gin, 30 ml. de bitter rojo o Campari y la misma proporción de vermut dulce.

- revolver suavemente y decorar con una rodaja de naranja o con la piel de la misma fruta.

- como opción, se puede agregar un toque de soda.

#NegroniWeek en Mendoza

Así como sucederá en las principales ciudades del mundo, Mendoza se pliega a las celebraciones de este clásico indiscutido, entre el 24 y 30 de junio próximo.

"Son muchos los bares y restaurantes de la provincia que se suman al festejo del Negroni, que fue elegido este año, como el segundo cóctel más famoso del mundo", comentó la sommelier María Eugenia Loria, dueña -junto al chef Mauricio García Hudson- de Santa y Pecador, el flamante bar de la ciudad, lugar elegido para realizar el lanzamiento de este acontecimiento.

El adelanto sirvió para imaginar las distintas recetas que cada referente podrá ofrecer en sus espacios, durante estos días, y la modalidad de esta movida que, básicamente, tiene que ver con acercarse a algún lugar y dejarse tentar por alguna o muchas de las propuestas que puede brindar este trago.

Un Negroni clásico, pero con un ahumado de tomillo y romero; un Negroni bien italiano pero con la infusión de vainilla, ron y espuma de naranjas; y hasta un Negroni con vino chardonnay y algarroba fueron las especialidades, en Santa y Pecador, de tres entendidos en la materia: Lucchio Morales, Martín Ferreyra y Melanie Arias.

Lo interesante, cabe destacar, es su fin benéfico: lo recaudado será donado al Banco de Alimentos.