Con la participación de especialistas de España, Perú y Buenos Aires y con la colaboración del Distrito del Vino porteño, Casa Vigil fue el escenario del cierre de “Carne & Vino” un evento que combinó dos de los productos más emblemáticos de la cultura argentina.
Durante el mediodía y la tarde del domingo, Casa Vigil, en el departamento de Maipú, más precisamente en Chachingo, fue el escenario del cierre de “Carne & Vino”, un evento internacional que durante cuatro días reunió a algunos de los chefs más destacados en lo que a carnes y cocina de fuego respecta, quienes maridaron sus platos con los vinos de Alejandro Vigil.
El “Messi del vino” fue el anfitrión de esta iniciativa de la que participó hasta Marcelo Tinelli, que sigue recorriendo bodegas en su paso por la provincia, y que contó también con la participación del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires a través de la Subsecretaría de Cooperación para el Desarrollo Económico y Producción, que a través de esta acción buscó potenciar y generar visibilidad al Distrito del Vino de la capital porteña.
Así, entre el 16 y el 19 de marzo cocinaron en la provincia José Gordon de El Capricho (España), Renzo Garibaldi de Osso (Perú y Brasil), Juan Gaffuri de Elena (Buenos Aires), Patricia Ramos de Nuestro Secreto (Buenos Aires), Javier Brichetto de Piantao (España), Guri Garat y Cesar Sagario de Corte Comedor y Corte Charcutería (Buenos Aires) y el local Iván Azar de Casa Vigil.
Después de una agenda cargada que también tuvo como locación Angélica, Cocina Maestra, el restaurante de Catena Zapata, los cocineros encargados del cierre fueron Javier Briachetto e Iván Azar, quienes con sus respectivos equipos presentaron platos como empanada criolla de ojo de bife; empanada de molleja de cordero con hongos y verdeo; sopaipilla de cabeza enterrada con encurtidos; croqueta de lengua de cordero con pimientos asados y encurtidos; taco de hígado de cordero a la veneciana; y buñuelos de seso de cordero y alioli lengua del diablo, para las entradas. En los principales sirvieron lechón, chivo, cordero, ojo de Bife Selección Don Luis; ojo de Bife Wagyu y pato, todo acompañado por ensalada de corazón de lechuga a la brasa; pepino seco aplastado con crema verde de cítricos; tomate quemado a fuego vivo con crema de escarola; y batata al rescoldo con hojas de plátano.
Todo, por supuesto, fue maridado por algunos de los mejores vinos de El Enemigo y de Catena Zapata, especialmente seleccionados para la ocasión. “Me parece que lo más importante es abrir los ojos y ver que Argentina tiene grandes vinos que pueden estar a la altura de cualquiera del resto del mundo y que hay posibilidades siempre que mucha más gente los conozcan y descubran nuestra identidad a través de los embajadores que vamos creando”, dijo Alejandro Vigil.
Con la intención de visibilizar el trabajo argentino, un punto alto del evento fue que permitió a Vigil crear nuevos embajadores del vino argentino en el mundo: “Es importante para nosotros también la parte comercial, pero lo que queremos es que sepan que en Argentina hacemos esto, que no hacemos solamente vino, sino que somos una cultura que hace 500 años lo venimos haciendo y que es nuestra forma de vida”, argumentó el enólogo.
Carne & Vino forma parte de una serie de eventos que ya vienen realizando en Casa Vigil, como Del Tomate, el reciente festival en que se mostró la diversidad del popular cultivo y todos los usos que puede tener en la gastronomía. Las propuestas continuarán y el próximo protagonista está directamente ligado a la agricultura mendocina: “Ahora viene un evento con el concepto de cultivo andino que va a hacer base en el papin andino, pero que también va a sumar otras verduras. Vamos a ver si para junio o julio podemos armar eso”, anticipó Alejandro Vigil.
Presencia internacional
Además de los más destacados cocineros de Argentina en materia de carne y fuegos, el evento de Casa Vigil contó con presencias internacionales, parte de “una red de amigos que cada vez se hace más grande”, como la definió Alejandro Vigil.
José Gordon, propietario de uno de los restaurantes de carne más destacados del mundo ubicado en Castilla y León, charló con Los Andes acerca de cómo fue su llegada al evento: “Llegamos a partir de mi amistad con Juan (Gaffuri). Estamos todos muy liados de trabajo, con muchos proyectos, pero decidí venir. Siento grandes vínculos con Argentina y el vino, porque El Capricho nació por el vino, en una bodega que había construido mi abuelo. Me atraía visitar Mendoza por esa relación. También, Argentina es el gran país de la carne, donde la cultura del asado, la reunión, es casi un acto social. Como especialistas en esto, queríamos venir”, contó el español.
Otro de los extranjeros, Renzo Garibaldi de Osso, restaurante con sede en Perú y Brasil, se mostró muy feliz con la experiencia. Si bien la relación con Alejandro data de una amistad de muchos años, es la primera vez que realizan un evento en conjunto. “Para nosotros el foco es el fuego y todo lo que podamos poner allí: la carne, los pescados, los mariscos. Todo eso se ve potenciado con una buena copa de vino. Cada quien tiene sus gustos y el mejor maridaje es el que te hace feliz. Yo soy un raro al que le gusta comer carne roja tomando vino blanco, no es lo más usual, pero es lo que me funciona a mí”, expresó sobre la combinación de los productos estrellas de la jornada.
“Alejandro (Vigil) nos comentaba que con estas actividades se dio cuenta de la relación tan bonita que hay entre la carne y el vino. Y nadie mejor que él para explicarlo. Es una relación que está ahí de toda la vida que se ha construido con tiempo, paciencia, respeto y usos similares”, añadió Garibaldi.
Si bien es argentino, Javier Briachetto de Piantao, con dos sucursales en Madrid, lleva instalado 16 años en España. “Es muy importante estar en estos eventos, porque estás difundiendo productos, la carne, técnicas y, en mi caso, la experiencia de un argentino que está triunfando en Europa con un producto de Argentina y compartiendo nuestra cultura en España, donde hacerse lugar no es fácil. Todo esto colabora a que el país se vaya posicionando y potenciando la marca país”, destacó sobre su participación.
Asimismo, reveló: “En España, el restaurante argentino era una experiencia españolizada, Piantao le dio una identidad argentina, no solo con la carne, sino con preparaciones como la humita, los vegetales trabajados en diferentes técnicas, entre otras cosas. Le damos mucha importancia a los músculos y las técnicas de cocción que usamos. No solamente ponemos en el fuego y cocinamos”.
Una alianza estratégica
La participación del Distrito del Vino en el evento organizado por Vigil es parte de una alianza estratégica entre ambas partes. Por un lado, la participación busca posicionar a la Ciudad de Buenos Aires como una vidriera internacional de la bebida. Por el otro, también se conecta con la primera gran inversión que tendrá el polo gastronómico, el arribo de Universo Vigil a la zona.
Carlos Macchi, subsecretario de Cooperación para el Desarrollo Económico y la Producción, estuvo presente en Mendoza y también habló con este medio: “Estamos haciendo una alianza estratégica con Alejandro Vigil para difundir y poder darle más conocimiento y lugar al distrito. Todo lo que hacemos es en pos de lograr mayor inversión. La Ciudad hace un esfuerzo económico importante dando ventajas impositivas sobre Ingresos Brutos, por lo que nuestras acciones van dirigidas a captar inversores”, declaró.
En este sentido, explicó que el distrito ya ha generado 15 millones de dólares por parte de siete proyectos de todo el país. “Hay mucha relación de pequeñas bodegas o representantes de algunos proyectos con la gastronomía. Hace 15 días abrió una importante vinoteca de la provincia de Salta, Alejandro Vigil ya hizo una importante inversión que abrirá pronto. Lo que queremos lograr es que se instalen más bodegas”, destacó el funcionario. Cabe recordar que la ley tiene un cupo de 30 inversiones que otorgan 75% de descuento en IB para las 15 primeras y 50% para las restantes.
