En una entrevista sobre la vendimia actual, Adrián Toledo contó además, sobre la cosecha en el contexto actual.
Con la cosecha finalizada, el enólogo de la bodega Vicentín Sottano, Adrián Toledo, destacó a la vendimia de este año por la gran calidad de las uvas y pronosticó que las bodegas podrán producir espumantes, blancos y tintos de excelente calidad.
¿Por qué fue tan bueno este año para la vendimia, a pesar de la cuarentena?, ¿Cuándo estarán listos esos vinos?, ¿Cómo fue trabajar con las restricciones que impuso el coronavirus? Éstas y otras preguntas y respuestas, a continuación, para entender cómo funciona la vendimia, paso clave para la producción de vinos.
-En términos generales, ¿qué significa tener una buena vendimia?
-Significa que un montón de factores se han alineado para que la uva llegue a su madurez sin inconvenientes, significa que el clima fue beneficioso para que la maduración se produzca sana, y significa que en bodega se trabajó bien y con buenos criterios para lograr lo que nos propusimos. En términos generales, se considera buena vendimia cuando se logra cosechar uvas sanas, sin problemas sanitarios que compliquen el futuro vino. Por supuesto, esto solo no alcanza y se deben ir tomando varias decisiones que condicionan inevitablemente qué tipo o estilo de vino vamos a obtener.
-¿Qué factores determinan que una vendimia sea buena o mala?
-El clima, principalmente. La marcha climática nos da las características principales de los vinos que vamos a obtener, y una vez que tenemos eso se debe ir interpretando para que todo fluya y llegue a buen puerto. De todas maneras, aclaro que un año puede ser muy bueno para una variedad y no tanto para otra, siempre estará condicionado por las zonas donde se trabaja.
-¿A partir de cuándo los vinos elaborados con la uva de la cosecha 2020 estarán disponibles en el mercado?
-Dependiendo de la línea y su crianza hay distintas fechas para esto. Por ejemplo, las variedades blancas frescas (sauvignon blanc, torrontés, semillón, chardonnay y viognier), en nuestro caso, van a estar pronto en el mercado, ya que las embotellamos rápidamente para conservar la frescura y la fruta. Para nuestros malbecs de alta gama habrá que esperar unos 3 años para que salgan al mercado, debido a que su estadía en barricas es larga y su guarda en botella también.
-¿Qué cepas se destacaron particularmente este año?
-Entre las variedades blancas que elaboramos, el chardonnay anduvo muy bien, ya que hay buena concentración y buena acidez. Creo que los de alta gama como nuestro Maria Magdalena se van a destacar mucho. Y entre las tintas, los malbecs de Los Chacayes me parecen los mejores de este año: tiene colores tremendos, aromas frutados, complejos y una gran concentración. Creo que, una vez más, el malbec se vio más beneficiado este año por el clima.
-¿Cómo fue la experiencia de trabajar en este contexto de pandemia y cuarentena?
-Muy distinta a otras. Todos los años tenemos algún factor interno o externo que hace las vendimias únicas, y este año no fue la excepción, todo lo contrario. Mucha incertidumbre, muchos cambios día a día, muy difícil de programar y organizar. Fue un desafío importante ir viendo día a día como íbamos solucionando los inconvenientes que se nos fueron presentando y cruzando los dedos para que nos permitieran levantar la uva. Por suerte, se pudo hacer bien gracias al trabajo de mucha gente y logramos obtener uvas de excelente calidad. La vendimia también se adelantó mucho y terminamos antes de los usual, esto también nos favoreció.
-¿De dónde provienen las uvas para los vinos de Vicentín Sottano?
En total, tenemos 75 hectáreas plantadas en espalderos en distintas zonas. Todas, en fincas en Mendoza; principalmente en Perdriel y Los Chacayes, donde concentramos la mayor cantidad, pero también trabajamos en Gualtallary, Altamira y Santa Clara. En este último distrito, trabajamos un viñedo que esta casi a 1.400 msnm. De allí obtenemos chardonnay y pinot noir muy interesantes de perfiles muy distintos a los típicos de estas variedades.