Con envase más práctico y adaptable a distintos momentos, la marca icónica de Bianchi busca seducir a nuevos consumidores.
Este verano el vino es protagonista. En la playa, en la pileta y a toda hora bajo el sol, el foco es pasarla bien; por eso, la practicidad manda. Siguiendo las nuevas tendencias que marcan un consumo más casual, individual y espontáneo, Bodegas Bianchi lanzó New Age en lata de 269 ml, el vino que creó en la Argentina la categoría frizzante.
Con un envase más práctico, fácil de transportar, que se enfría más rápido y es adaptable a distintos momentos del día, la marca icónica de Bianchi hoy impulsa el cambio en su segmento y busca seducir a nuevos consumidores disputándoles el espacio ganado en los últimos años a las cervezas y otras bebidas.
El formato tiene un motivo: 269 ml es la medida adecuada para preparar rápidamente un trago largo. Se agrega hielo y el jugo de media lima y se obtiene el exitoso Tincho, el coctel que, desde hace 5 años, es furor en las barras y afters de Estados Unidos. Un dato relevante si se tiene en cuenta que es el país con el mayor crecimiento de vino en ese formato. Durante 2018 en el mercado americano, el vino en lata incrementó sus números en un 69% la facturación y 47% en litros con relación al año anterior.
En Argentina, el vino en lata está de estreno y el principal motor de este lanzamiento tiene que ver con los hábitos de consumo de las nuevas generaciones: la lata es más liviana que el vidrio, tarda menos en enfriarse, resiste mejor los golpes y es fácil de transportar lo que asegura un consumo más espontáneo.
Según datos de Kantar Wordpanel 2019, el 90% de los litros que pierde el consumo de vinos es en mano de las cervezas en lata y el aumento de esta penetración en los hogares se da por el crecimiento del canal supermercados.
Teniendo estos datos en cuenta, Adrián Cura, gerente de Marketing de Bodegas Bianchi analiza: "Nos planteamos como objetivo diversificar nuestra oferta incorporando la lata, un envase recientemente aprobado por el INV para el vino. Así, podremos aumentar la penetración en hogares y fundamentalmente, ganar nuevas ocasiones de consumo hoy restringidas o muy limitadas por el envase de vidrio. La lata permite una mayor frecuencia de consumo debido a la conveniencia y por ser ideal para consumo individual".
New Age sigue sumando originalidad y diseño al mundo del vino al tiempo rompe los códigos clásicos del vino encerrado en una botella y acerca el disfrute en cualquier ocasión del día a través de la lata.
"El cambio de imagen fue sólo el comienzo de una nueva etapa para la marca con la que buscamos abrirnos más al mundo y renovar el vínculo con los consumidores, invitándolos a que descubran un vino dulce diferente, rico, fácil de tomar y con la calidad que caracteriza a las marcas de Bodegas Bianchi. Por eso ahora ampliamos la oferta sumando la nueva presentación: la lata de 269 ml", explica Sebastián Neira, brand manager y continúa: "New Age representa el territorio de la energía en el mundo del vino. Una marca que se identifica con el disfrute que propone un estilo actual y descontracturado de consumo, ya no sólo ligado a la noche sino para cualquier ocasión y momento con amigos."