Una agencia publicitaria creó una etiqueta que se basa en la botella que apareció en uno de los nuevos mapas del popular videojuego.
El mundo gamer ya tiene su vino. Se trata de “Wine Of Duty”, el primero inspirado en los videojuegos. La idea se inspiró en uno de los últimos mapas del Call of Duty, donde aparecía un vino mendocino que ahora dio origen a un Malbec que apunta a conquistar a nuevas generaciones.
El lanzamiento de esta nueva etiqueta nació de la asociación de la agencia publicitaria The Juju y Anfibio Vineria, quienes sacaron a la luz el primer vino nacido en el mundo virtual, directamente producido en Mendoza.
Los fanáticos del Call of Duty, uno de los videojuegos más populares del mundo, deliraron con la aparición de un Malbec mendocino en la presentación del último mapa. Así, ahora en el mundo real, todos los amantes del mundo gamer, podrán degustar el verdadero sabor de ese vino que vieron detrás de la pantalla.
“Esto es mucho más que un real time, es un nuevo vino, que respeta los valores de su etiqueta y origen. Ahora quienes quieran saber cual es el sabor de ese vino que figura en el juego podrán encontrarlo en Anfibio Vineria”, dijeron Nicolás Zarlenga y Federico Plaza Montero, CCOs & Partner de The Juju Argentina, conforme a lo publicado por el portal iPro Up.
En un lanzamiento con bombos y platillos, los creadores del “Wine of Duty” acompañaron al nuevo vino con una pieza audiovisual donde se mezclan los límites de la realidad y la ficción de una manera sorprendente.
Los números que genera los eSports
La rentabilidad del mundo gamer cada vez es mayor. Eso se puede ver reflejado en cifras como las que generan los eSports, que año a año siguen rompiendo récords en el mundo y Latinoamérica. Conforme a lo publicado por Newzoo, en esta parte del mundo, una transmisión en vivo de una competencia de este tipo superará los 100 millones de espectadores en 2022 y podría romper la barrera de los 122 millones en 2024.
En cuanto a dinero, los deportes electrónicos podrían llegar a una ganancia de u$s58 millones en 2022 en América Latina y podrían superar los u$s 71 millones en 2024. Aunque en el mundo esta cifra puede llegar a los u$s1.500 y los u$s3.200 millones para el año próximo.