La estrella de Lakers es un confeso amante del mundo del vino. Pese al alto rendimiento, se las ingenia para disfrutar de buenos vinos y tener un gran desempeño.
La idea de combinar el deporte de alto rendimiento y el consumo habitual de bebidas alcohólicas parece algo completamente incongruente. Pero esta especie de regla inquebrantable en el mundo deportivo parece no aplica para LeBron James, es que la estrella de la NBA viene disfrutando desde hace algunos años de su mejor nivel en el básquet y su pasión por el vino.
A finales de 2016, cuando todavía pertenecía a la franquicia de los Cavaliers había confesado en medio de las Finales de la NBA que lo único que necesitaba para reponerse de la derrota era comida y vino.
Aunque no hay evidencia respecto al consumo de vino y su nivel de juego, “The King” logró combinar su mejor nivel en la liga más exigente del mundo con un consumo rutinario de vino. Pero, en 2017, en medio de una visita de su equipo a Napa Valley, había hablado de su pasión: “En cuanto a los poderes curativos... estoy jugando el mejor básquet de mi vida y bebo vino casi todos los días”.
“Cuando cumplí 30 años, empecé a aprender sobre el vino porque todo el mundo hablaba de lo bueno que es. Comencé a investigar un poco y probar diferentes vinos, y tardé un tiempo para que mi paladar se acostumbrara”, contó en aquel entonces.
El interés de la estrella de Los Ángeles Lakers no quedó ahí: “A lo largo de estos años he estado aprendiendo mucho sobre los diferentes tipos de uvas, diferentes tipos de regiones, el tinto, el blanco, el rosado, los champanes…”, agregó.
Incluso, quien es el protagonista de la remake de “Space Jam” ha ingresado a la cancha -nada más y nada menos que en la previa del clásico de la ciudad de Los Ángeles- tomando un vaso de vino. Y como no podía ser de otro modo, celebró el anillo obtenido el año pasado con la franquicia de California brindando con un exclusivo vino español.
También, ha puesto en manifiesto su devoción por la bebida en sus redes sociales en más de una oportunidad. Esto se ha visto las veces que ha mostrado su impactante bodega hogareña en la que se destacan exclusivos vinos de las regiones más importantes del mundo, o el año pasado cuando en pleno confinamiento mundial por el coronavirus y el parate en la competición confesó su necesidad de tener a alguien con quien disfrutar de una buena botella. “Necesito un compañero de vino”, escribió en marzo de 2020 en su cuenta de Twitter.
