Los números de la industria crecen mientras los productores delinean estrategias en una nueva edición de la feria de Vinos Orgánicos y Sustentables.
La producción de vinos orgánicos crece año a año gracias al nuevo paradigma que atraviesa a la industria, más comprometido con el medio ambiente y la sostenibilidad. Pero también por las políticas que se impulsan desde el sector público en conjunto con los privados que buscan añadir valor a sus productos, más allá de la concepción de la sustentabilidad.
Lo que crece no solo es la conversión de los viñedos a orgánicos y por ende la producción de vinos con esa certificación, sino que también empieza a crecer la exportación ya que el interés sobre estos productos también surge desde los países de Europa, cuyas industrias ya trabajan hace años en este proceso.
En ese sentido es importante decir que durante el 2020 el consumo interno total de vinos orgánicos fue de 167.125 litros. Lo que implica un crecimiento superior al 5.000% en comparación con el 2018.
A su vez, se exportaron más de 10 millones de litros de vinos orgánicos certificados, casi 3 millones de litros más que el año anterior. Como dijimos, la Unión Europea es el principal mercado.
A propósito, este jueves el presidente del Instituto Nacional Vitivinícola, Martín Hinojosa, confirmó que los vinos orgánicos no pagarán derechos de exportación.
Industria
Sobre la producción, Mendoza concentra la mayoría de los viñedos certificados, con una superficie sembrada superior a las 7.000 hectáreas. El porcentaje de vides con certificación orgánica del total de la producción argentina sigue siendo muy bajo, apenas superior al 2%.
En este contexto, los productores argentinos tienen una fecha para hacer un balance del estado de la industria en una nueva edición de la Feria de Vinos Orgánicos y Sustentables que es organizada por VIOS y se llevará a cabo este viernes en Buenos Aires.
Vinos orgánicos
Un vino orgánico y otro no orgánico no tienen ningún tipo de diferencia en cuanto al sabor, aromas, texturas, etcétera. La única diferencia es la particularidad de no contar en ningún químico en ninguna etapa de la producción
El proceso para que una empresa productora de vinos orgánicos convierta sus viñedos es largo y costoso. Implica equilibrar los viñedos por lo menos durante 3 años.
Es por esto que la producción de vinos orgánicos crece de manera relativamente lenta. Sin embargo, la tendencia invita a pensar que este proceso se acelerará cada vez más y la industria tendrá un nuevo valor agregado en sus vinos, independientemente de los altos estándares de calidad que de por sí ya tiene Argentina.
