El afamado cocinero argentino lanzó “Disobedience”, una etiqueta que elabora en la provincia con Bodega Kaiken.
La gastronomía y el vino son por excelencia el maridaje perfecto y uno de los mejores chefs del mundo no podía no tener su propia etiqueta. Ahora, Francis Mallmann podrá acompañar a la perfección su cocina de fuegos con Disobedience, su propio vino, el cual elabora junto a Bodega Kaiken y presentó en la provincia de Mendoza.
A metros de los viñedos que el establecimiento de capitales chilenos tiene en Luján de Cuyo, con el fuego de Ramos Generales ardiendo en el centro de la escena y la presencia del afamado chef y Aurelio Montes, propietario de la bodega, decenas de personas pudieron probar lo que Kaiken Disobedience 2019 tiene para ofrecer.
Se trata de un Red Blend que proviene de las micro regiones de Vistalba en un 60% y de Altamira el resto. La composición de esta primera añada fue definida completamente por Mallmann y es un 60% Malbec, 30% Cabernet Sauvignon y 10% Merlot.
“Este vino nació con la idea de elaborar un ejemplar que me represente tanto a Bodega Kaiken como a mi. Queríamos que fuera complejo y sencillo a la vez, no teníamos pensado realizar un blend pero de a poco fuimos llegando a este resultado luego de degustar y analizar más de 40 vinos distintos, de diferentes cepas y regiones de toda la provincia. Lo degustamos cada dos meses y veo que va creciendo correctamente, en cuatro años será más delicioso aún”, dijo durante la presentación el cocinero, propietario del restaurante que ha sido elegido como uno de los lugares para visitar en Mendoza por la revista Time.
Por su parte, Montes, que llegó de Chile especialmente para la ocasión, aseguró: “Con el equipo de Kaiken hemos logrado conocer muy bien algunas zonas y separamos ciertas muestras de distintas zonas que Francis con su talento olfativo excepcional fue seleccionando, ese es origen de la añada 2019″.
“Tal como dice él, el vino es celebración. Y este es un vino creado para tal motivo, para celebrar la amistad, el amor y el reencuentro. Porque celebrar es un acto de libertad, nadie te puede decir cómo hacerlo, es por eso que este vino es libre y desobediente (como Francis). Nada de maridajes ni protocolos, que para eso ya hay muchos vinos”, agregó.
Cuánto vale el vino de Francis Mallmann
“Me he dado cuenta, después de todos estos años de cocinar y pasar mi vida en restaurantes, que, al final, lo más importante de comer y beber y es compartir. El vino para mí es esperanza, en este momento más que nunca, porque nos junta en la mesa”, aseguró el chef.
Más allá de esta poética declaración, para poder compartir y juntarse en una mesa con Kaiken Disobedience hay que invertir cierta suma de dinero, ya que el precio sugerido de cada botella es de $2.000.
Un espíritu desobediente
Durante la degustación de esta nueva etiqueta, el fundador de Kaikén y Viña Montes, en Chile, destacó: “Ambos hemos sido disruptivos, innovadores y un poco desobedientes, cada uno en su área”.
Y esa desobediencia se ve reflejada en lo que vendrá para este vino. Justamente por este carácter, el enólogo reconoció que sintieron que no están obligados a repetir la composición del corte y se han permitido jugar con otros varietales, como en 2020, que recién verá la luz en el mercado dentro de un año o más, que tiene Cabernet Franc como novedad.