Martini: cómo acompañar este clásico cóctel

Si sos amante del vodka o la ginebra el tipo de garnish es casi tan importante como el propio cóctel. Te presentamos cuáles son los ingredientes acompañan al clásico Martini, uno de los cócteles más conocidos, compuesto de ginebra con una porción de vermut. Suele servirse en copa de cóctel, adornado con una aceituna cruzada.

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Para que un Martini parezca profesional y pulido, hay algo más que pura estética. A fin de cuentas este cóctel no está completo sin una guarnición. Aunque parezcan sencillos, los distintos tipos de garnish tienen el poder de transformar por completo nuestro trago.

Tipos de Garnish vegetales y frutales

Aceitunas verdes

Las aceitunas verdes son probablemente lo que piensas cuando te imaginas un Martini clásico, y este complemento salado es un elemento básico por una razón. A diferencia de muchos cócteles, los Martinis no son intrínsecamente dulces. Limpio, suave y ligeramente herbáceo son calificativos más precisos para esta bebida tan apreciada, y una aceituna verde salada realza las notas saladas de un Martini.

Aunque cualquier aceituna verde puede servir, si vas a preparar la bebida en casa, le recomendamos que gaste un poco y compre las mejores.

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Aceitunas rellenas de queso azul

Si quieres algo que sea un poco más aventurero que una aceituna verde común, trata de elegir la rellena de queso azul. Este queso brinda un complemento perfecto para la salinidad vigorizante de las aceitunas verdes. La textura cremosa del queso hace que sea un bocado delicioso cuando llegue al final de su Martini y esté listo para disfrutar de un aperitivo salado.

Cebolla encurtida

Amantes de las bebidas saladas, esto es para ustedes. Añadir una cebolla encurtida a un Martini no sólo te hará sentir como si estuvieras bebiendo un cóctel de otra época, sino que también transformará el cóctel en una típica variación llamada Gibson.

Twist de limón

Un twist de limón es otra guarnición a la que recurrir para un Martini clásico, y es una opción en la que puedes confiar en cualquier bar o restaurante en el que puedas hacerte con uno.

Lo importante es recordar que no se trata simplemente de echar la cáscara en la bebida o apoyarla en el borde del vaso. En lugar de eso, tienes que exprimirla sobre el Martini, lo que significa que tienes que sujetar con la cáscara hacia abajo sobre la bebida y luego girarla para liberar los aceites de la corteza. A continuación, frota la cáscara alrededor del borde de la copa, añádela al Martini y tendrás una bebida perfectamente ejecutada con un twist.

Optar por un twist añade un toque de acidez y brillo que puede hacer más bebible esta bebida cargada de alcohol. Puede añadir una capa de sabor a un vodka que, de otro modo, sería relativamente neutro, realzar las notas cítricas de la ginebra y potenciar los sabrosos ingredientes botánicos del vermut seco.

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Twist de pomelo

Un twist de pomelo es otra buena opción para cuando quieres añadir un poco de chispa a tu Martini. El pomelo es amargo, ácido y refrescante, y también es una nota de sabor prominente en algunas ginebras. El pomelo también combina bien con el romero, así que también puedes buscar ginebras con mucha hierba.