A continuación, te revelamos un secreto clave para mantener como el primer día un valioso electrodoméstico.
Los electrodomésticos han irrumpido de manera drástica en nuestras vidas y nos ayudan a solucionar problemas de la vida cotidiana en tiempos donde, valga la redundancia, el tiempo es oro. Es por eso que la mayoría de nosotros no podemos imaginarnos la rutina diaria sin la ayuda de dispositivos como lavadoras, lavavajillas, cocinas y heladeras.
Para garantizar que estos aparatos sigan siendo eficientes y duraderos, es esencial brindarles un cuidado adecuado, lo que implica seguir rutinas de limpieza y mantenimiento regular.
Uno de los ejemplos que demuestran que se pueden mantener eficazmente los electrodomésticos se relaciona con la heladera. Y aquí viene uno de los secretos caseros más fáciles y eficaces que existen para evitar los malos olores.
Los corchos, que solemos tirar después de abrir una botella de vino y consumirla, pueden resultar muy útiles en casa. En lugar de desecharlos, podemos aprovecharlos para resolver un problema común en todos los hogares: los malos olores en el interior de los electrodomésticos.
El truco es sencillo. Toma un corcho y colócalo en uno de los estantes de tu heladera. También podes cortarlo en dos o tres partes y distribuir los trozos en diferentes lugares del interior, incluyendo el freezer y los cajones. Hazlo por la noche y, al día siguiente, comprueba la diferencia. Vas a comprobar que el olor desagradable que a menudo se acumula en el interior de estos electrodomésticos ha desaparecido casi como por arte de magia.
Dónde está el secreto
El secreto radica en que el corcho es un material poroso que absorbe la humedad y los malos olores. Esta estratagema es especialmente eficaz para eliminar olores en la heladera. Si lo deseas, podes añadir unas gotas de aceite esencial, como limón fresco, al corcho para perfumar el interior del electrodoméstico. Otros cítricos, como la naranja, el pomelo, la bergamota y la mandarina, también pueden funcionar bien para este propósito.
Qué causa los malos olores en la heladera
Los malos olores en la heladera suelen ser causados por varias razones. Algunos alimentos, como el ajo, la cebolla y ciertos quesos, tienen olores fuertes de forma natural. Los alimentos en mal estado, como frutas podridas, también pueden ser culpables de los malos olores. Almacenar alimentos de manera incorrecta, como sin protección de papel de aluminio o sin contenedores herméticos, puede agravar el problema. Por último, no limpiar regularmente el frigorífico contribuye a la acumulación de malos olores.
Se recomienda limpiar el interior del frigorífico y sus estantes con una solución de agua y bicarbonato o agua y limón cada 15 o 20 días. Realizar esta tarea antes de hacer la compra es una excelente idea, ya que la heladera estará casi vacía, lo que facilitará la limpieza. Además de estas medidas de mantenimiento, poner un simple corcho puede ayudar a evitar futuros problemas de malos olores.