Baja el volumen, pero crece el valor exportado de vino: ¿celebrar o preocuparse?

Baja el volumen, pero crece el valor exportado de vino.
Baja el volumen, pero crece el valor exportado de vino.

El impacto de la inflación y la incertidumbre en los mercados mundiales repercute de manera dispar en la industria vitivinícola.

Según el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv), el comercio mundial de vino ha alcanzado un hito histórico. Con un aumento del 7,1% en términos de valor en el interanual hasta marzo de 2023, llegando casi a los 37.994 millones de euros.

Sin embargo, este aumento no se tradujo en un incremento del volumen exportado, que ha disminuido un 4,3% hasta los 10.425 millones de litros. La disminución en el volumen se explica por un incremento en el precio promedio del vino, que aumentó un 11,9% llegando a 3,64 €/litro, marcando el nivel más alto registrado en la serie histórica.

Si comparamos con el mismo período del año anterior, el comercio mundial de vino aumentó en 2.513 millones de euros, a pesar de perder 469 millones de litros. Es importante destacar que un aumento en el valor no siempre se traduce en una mayor rentabilidad, especialmente en un contexto de inflación y crecimiento de costos que hemos experimentado a nivel global durante más de un año.

Las ventas de vino bajan y tiene varios motivos socieconómicos.
Las ventas de vino bajan y tiene varios motivos socieconómicos.

Ante la incertidumbre actual en el comercio internacional, el OeMv ha iniciado un seguimiento mensual del comercio global de vino. En marzo, se observó un crecimiento del 2,7% en el volumen de vino comercializado a nivel mundial, rompiendo con cinco meses consecutivos de pérdidas.

Mientras tanto, la facturación aumentó durante 26 meses seguidos, al igual que el precio medio del vino, que estuvo en constante ascenso. Sin embargo, el incremento del precio promedio en marzo (+2,3%) fue el más bajo en estos 26 meses, y la facturación comienza a mostrar señales de desaceleración, al tiempo que la inflación parece reducirse.

¿Buena o una mala señal?

El crecimiento en el valor del comercio mundial de vino, a pesar de la disminución en el volumen exportado, podría indicar que los consumidores están dispuestos a pagar precios más altos, quizás debido a una percepción de mayor calidad o a una mayor demanda en comparación con la oferta disponible. No obstante, esto también podría deberse a la inflación global y al aumento de los costos de producción, lo que lleva a los productores a incrementar los precios para mantener su rentabilidad.

Venta de vinos, imagen ilustrativa. 
Foto: José Gutierrez / Los Andes
Venta de vinos, imagen ilustrativa. Foto: José Gutierrez / Los Andes

Es fundamental comprender que, en un entorno de inflación elevada y costos en aumento, el aumento en el valor del comercio de vino no necesariamente se traduce en una mayor rentabilidad para los productores, ya que los costos de producción, transporte y comercialización también han aumentado, impactando en los márgenes de beneficio.

En un momento de incertidumbre económica global, volatilidad en los mercados y alta inflación, es alentador ver signos de crecimiento en el comercio mundial de vino. Sin embargo, es esencial garantizar que este crecimiento sea sostenible y no comprometa la rentabilidad de los productores ni la accesibilidad de los consumidores.

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